Uno de los pilares de nuestro proyecto educativo es, sin lugar a dudas, la interacción cooperativa de nuestros alumnos durante el transcurso de las clases. Desde los niveles de Infantil a Bachillerato, nuestro claustro de profesores promueve la enseñanza buscando la socialización de nuestros estudiantes en grupos de trabajo.
A lo largo del curso académico ponemos en marcha diferentes iniciativas y actividades en el aula que promueven el trabajo coordinado para resolver las tareas académicas. Por ejemplo, dividimos la clase en grupos pequeños de trabajo y promovemos que nuestros estudiantes multipliquen sus curiosidades, investiguen por su cuenta y hagan de la motivación su leitmotiv escolar.
Creemos en el aprendizaje cooperativo como una herramienta vital a la hora de lograr una mejora del aprendizaje significativa: el alumno se motiva al verse directamente implicado en las tareas, muestra una mayor iniciativa e implicación y trabajando en grupo potenciamos su comprensión y asimilación de contenidos.
Finalmente, la convivencia escolar también sale reforzada de todo este proceso, puesto que nuestros estudiantes – al implicarse de manera colectiva en conseguir un mismo fin común- mejoran sus relaciones personales, su autoestima y la inclusividad en el aula.
